En esta oportunidad deseamos expresar en nuestro blog semanal lo que debemos hacer los miembros de la Iglesia Peregrina, por aquellos hermanos que al fallecer no hayan podido reconciliarse con Dios.
Esta situación se presenta cuando al fallecer repentinamente la persona en trance de muerte, su alma no se halla en estado de gracia y las faltas y ofensas producidas en vida contra Dios, persisten como una impureza que no les permite acceder de inmediato a la vida eterna en el Reino de los Cielos.
El alma que se desprende intempestivamente, sin aviso previo, del cuerpo que la albergó en vida, pasa a ser parte de la Iglesia Penitente o Purgante.
En este estado, el alma por sí sola, ya no puede hacer nada por su salvación.
Es aquí donde la misericordia de Dios se hace presente, y permite que las personas en vida, pertenecientes a la Iglesia Peregrina, podamos orar implorando por la purificación del alma en penitencia.
A continuación, queridos hermanos, con humildad les presento cómo y cuando podríamos hacer nuestras oraciones por todas las almas que enfrentan la situación de desamparo en el caso de una muerte súbita.
No es mi intención que hagan exactamente lo que otros hacemos, más bien, es una sugerencia que ustedes podrán adaptar a su propia personalidad o una guía para crear sus propias oraciones.
Cada día de la semana, está destinado a orar por una particular necesidad, menos el día Domingo que es el día exclusivo del Señor, como por ejemplo:
- Lunes es día de agradecimiento a Dios por todos los beneficios recibidos de su Santa Misericordia.
- Martes, es el día de oración por el Papa, nuestro Obispo, nuestro Párroco y los Párrocos que forman parte del Decanato de la Diócesis a la que pertenecemos, así como por todos los sacerdotes ancianos y enfermos.
- Viernes es el día dedicado a las almas de las personas fallecidas. Los cinco Misterios del Rosario los asignamos a cada situación ocasionada por la muerte y con la intercesión de cinco Advocaciones de la Santísima Virgen María.
- Primer Misterio: con la intercesión de la Santísima Virgen del Perpetuo Socorro, por todas las almas que entran al estado penitente debido a la muerte repentina ocasionada por los accidentes terrestres, marítimos, aéreos, u otras causas relacionadas.
- Segundo Misterio: con la intercesión de la Santísima Virgen de Guadalupe, por las victimas de guerras y conflictos. Especialmente, niños, mujeres y ancianos.
- Tercer Misterio: con la intercesión de la Santísima Virgen del Carmen por todas las almas del Purgatorio.
- Cuarto Misterio: con la intercesión de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento, por todos los suicidas y asesinados.
- Quinto Misterio: con la intercesión de la Santísima Virgen de la inmaculada Concepción, por todos los sacerdotes ancianos y enfermos que por alguna razón mueren sin estar reconciliados y en paz con Dios y consigo mismos.
- Como una ultima invocación de la oración, pedimos a Dios Todopoderoso, que en todos los casos, según su Santa Voluntad, les de la última oportunidad, con el último soplo de vida del pecador, a arrepentirse de corazón de las ofensas cometidas.
El tiempo, no menos de una hora que era el tiempo que Jesús pedía a sus discípulos para que le acompañaran a orar.
El lugar, un lugar santo y de recogimiento. El lugar más propicio y de más agrado para Nuestro Señor Jesucristo, es la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua.
¿Por cuantas semanas?...
Por todas las que nuestro Dios y Señor nos conceda de vida en este lugar de penitencia y peregrinación y después por su Divina voluntad y nuestros propios méritos tengamos la dicha de pertenecer a la Iglesia Triunfante. Allá en el cielo.
Alabado y Adorado sea por siempre Jesús Sacramentado
¡¡¡ Viva Cristo Rey !!!
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