miércoles, 30 de diciembre de 2015

Historia del Niño Jesús después de su Nacimiento.


A propósito de la Navidad y continuando con la solemnidad de la fecha que acabamos de celebrar, se nos vino a la imaginación conocer los acontecimientos ocurridos con el pequeño Jesús después de su nacimiento.

Este es un trabajo sencillo escrito con la humildad del amor que tenemos por Jesús Niño, en el cual detallamos sucesos muy conocidos por casi todos los católicos y desconocidos también por algunos más. He aquí el testimonio de nuestra investigación.

Nacimiento de Jesús (Mateo 1, 18-25)

Y sucedió en aquellos tiempos que por edicto del Emperador romano Augusto César, todo el mundo debía de ser empadronado. A José y su esposa la Virgen María, les correspondía empadronarse en Belén por ser miembros de la Casa de David. Y José bajó de Galilea de la ciudad de Nazaret hacia Judea, a la Ciudad de Belén. Lugar donde nació, en un pesebre, por no haber encontrado alojamiento en la ciudad, Jesús el Mesías, nuestro Redentor Hijo de la Santísima Virgen María.

Circuncisión de Jesús (Lucas 2,21).  1 de enero 

Habiendo cumplido el Niño Jesús el octavo día de su nacimiento había de ser circuncidado. La circuncisión era el signo de incorporación al pueblo de Israel. Significaba además del Rito de la Ley Judaica, participar de circuncidar el corazón de sus malos afectos y concupiscencias para llegar a la vida eterna. Y se le puso el nombre de Jesús, tal como había sido ordenado por Dios por medio del Ángel Gabriel, cuando hizo la anunciación a la virgen María. Jesús, es la forma abreviada de “Yehoshua” : -Yahve salva- o Salvador.
Y con la dolorosa circuncisión, Cristo derramò ya la primera sangre redentora.


Presentación del niño Jesús al templo (Lucas 2,22-38) – 2 de febrero -

Esta fiesta, que cierra las solemnidades de la  Encarnación, conmemora la presentación del Señor, el encuentro con Simeón y Ana,  y la purificación ritual de la Virgen María.

Cuando se cumplieron los cuarenta días del nacimiento de Jesús, llevaron al niño al templo, a fin de presentarlo al Señor, según la ley de Moisés.Simeón, al ver a María y a  José con el niño Jesús, conoció por una revelación divina que era Cristo. Tomò entonces al niño en sus brazos, bendijo a Dios y exclamò: ”Ahora puedes dejar morir en paz a tu siervo, porque han visto mis ojos a tu salvador, luz para las naciones y gloria de Israel.”Había también en el templo una profetisa, llamada Ana, que como se presentase a esa misma hora, alababa a Dios y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención  de Jerusalén. Y María y José admiraban las palabras de Simeón y de Ana.


Los Reyes Magos y su Adoración a Jesús

Aunque no hay indicación de la fecha en que los Reyes Magos visitaron a Jesús para adorarle, se supone que fue después de los acontecimientos que hemos señalado anteriormente.

Después de haber nacido Jesús en Belén de Judea se presentaron en Jerusalén unos reyes de oriente preguntando dònde estaba el niño, Rey de los judíos. Gobernaba en ese tiempo Herodes El Grande, quien al escuchar a los reyes; solicitò a sus sacerdotes y conocedores de las Escrituras, le dijeran dònde debía de haber nacido el Mesías, ellos le contestaron que según las Sagradas Escrituras era en Belén.
Herodes entonces llamò a los Magos y les pidió que a su regreso cuando volvieran de ver al Niño Dios, le indicaran dònde estaba, porque èl quería ir a adorarle también.
Luego de visitar a Jesús y dejarle los regalos que le habían llevado, advertidos por una revelación divina, para que evitaran revelar a Herodes el lugar donde estaba el Niño Rey de los judíos, volvieron a sus países por otro camino.
Enterado Herodes después de una larga espera, que los reyes se habían ido sin dejarle las señas de donde estaba el niño, ordenò a sus servidores que dieran muerte a todos los niños nacidos en Belén y que al momento tendrían dos años de nacidos. Y así se concretò la muerte de los primeros mártires del cristianismo y que hoy recordamos el 28 de Diciembre como el día de los Santos Inocentes.


Huida a Egipto de la Sagrada Familia, Jesús, María y José.

Enterado José por una revelación del ángel de Dios de las órdenes impartidas por Herodes de dar muerte a todos los niños menores de dos años nacidos en Belén, tomando a su familia, emprendió la huida hacia el país de Egipto. Travesía dura y penosa que debió durar entre 15 a 20 días.
 
La Sagrada Familia permaneció en Egipto por un tiempo no determinado, donde vivía dentro de la comunidad israelita que era numerosa. Igualmente por un aviso divino se le dijo que ya podían volver a Judea porque el Rey Herodes había ya fallecido. Pero como le sucedió en el trono su hijo que era tan cruel y despiadado como él, José decidió regresar a Galilea a  la Ciudad de Nazaret donde reinaba un rey más indulgente. Es así como Jesús vivió y creció en esa ciudad y para cumplir lo dicho en las Escrituras el mesías fue también llamado como El Nazareno.


Jesús en el Templo entre los Doctores de la Ley (Lucas 2,41-52)

Con motivo de la Fiesta de la Pascua, la Virgen María y San José llevaron a Jesús, que ya había cumplido los doce años, edad en que los niños eran aptos para participar en esta fiesta. Por lo tanto era la primera vez que Jesús asistía a esta celebración. Según la Ley Mosaica los niños varones a los doce años son considerados Hijos de la Ley y deben ir al templo a recibir el complemento de sus conocimientos en cuanto a las leyes judaicas.
Mientras sus padres convivían con amigos y parientes, el niño permaneció en el Templo recibiendo las enseñanzas de los Doctores de la Ley. Pasados tres días sus padres se preocuparon de no haberlo visto y fueron a buscarlo al Templo donde lo hallaron discutiendo con los Doctores de la Ley, que asombrados contestaban a las profundas preguntas que les hacia el niño Jesús.
Cuando lo vieron quedaron sorprendidos, y su madre le dijo: ”hijo, ¿por qué nos has hecho esto?” Mira, tu padre y yo, angustiados, te andábamos buscando. Y él, les dijo: “¿por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la Casa de mi Padre?” Pero ellos no comprendieron la respuesta que les dio.
Bajò con ellos, vino a Nazaret y vivía sujeto a ellos. Su madre conservaba cuidadosamente todas las cosas en su corazón. Jesús progresaba en sabiduría,  en estatura y en gracia ante Dios y ante los hombres.

Esperamos que este breve relato de los acontecimientos durante la infancia, y niñez de Jesús, Nuestro Dios y Señor, les permita comprender el misterio generoso de su Encarnación para entregarnos su vida y darnos con su sacrificio de amor, la vida eterna.




Alabado y Adorado sea por siempre Jesús Sacramentado

¡¡¡ Viva Cristo Rey !!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario