La Iglesia Católica y su papel en la Independencia de Hispanoamérica

El movimiento de Independencia en los países hispanoamericanos
ciertamente tuvo como sus principales impulsores a destacados sacerdotes de la Iglesia Católica. Escribir una relación de los llamados curas que lucharon por la Independencia de las actuales Repúblicas Hispanoamericanas es una investigación tan ardua que excede el tiempo y capacidad de este artículo conmemorativo.

Es bien conocido por todos que Nuestra Señora la Virgen de Guadalupe y la Iglesia de Cristo fueron verdaderos precursores en la independencia de nuestras respectivas patrias. Los sacerdotes fueron los instrumentos de estas dos fuerzas poderosas, entre ellos, solo como ejemplo recordemos a algunos de los que lucharon por su patria con bravura sin par.


El Padre Miguel Hidalgo y Costilla quien encabezó la gesta independentista en México llevando como estandarte en su lucha la sagrada imagen de la Virgen de Guadalupe.

El Padre José María Morelos quien sucedió a Hidalgo en la lucha, pagando con su vida la defensa de sus principios.

Mariano Matamoros sacerdote mexicano que en 1811 se unió a las fuerzas de Morelos que lo nombró Coronel.

El Presbítero Ildefonso Escolástico Muñecas, sacerdote y patriota argentino que participó en la insurrección de Bolivia y Perú.

Fray Luis Beltrán sacerdote y soldado de la independencia nacido en Mendoza, Argentina, nombrado por el General José de San Martín encargado de la fabricación de cañones, fusiles, municiones y uniformes para las fuerzas libertadoras y quien hizo campaña en Perú y luchó luego bajo las órdenes de Simón Bolívar.


Un ejemplo a destacar fue Fray Melchor Talamantes y Baeza, mártir de la independencia de México. Peruano de nacimiento, pero mexicano de adopción, este sacerdote que nació en 1765 era un Cura revolucionario de gran erudición, mente brillante y convincente oratoria. Aliado de los criollos liberales mexicanos pagó con su vida el acariciado sueño de ver a México libre. México lo recuerda por eso como un protomártir, el primero de los mártires, de la Independencia Mexicana. El nombre de Fray Melchor de Talamantes no figura en los libros de historia de Perú, pero sí en el Ángel de la Independencia de la Ciudad de México.

Es para nosotros un honor el haber podido dar a conocer los nombres de algunos, muy pocos, miembros de nuestra Santa Iglesia Católica que lucharon y dieron su vida por una causa que Dios defiende, la de la Libertad e Igualdad de todos los seres humanos.

Ahora a nosotros nos toca ser los revolucionarios de la actualidad difundiendo y luchando para que la Adoración Eucarística Perpetua sea el movimiento que regenere al mundo y salve a la humanidad. Dios está con nosotros, nada ni nadie podrá contra nosotros.

¡¡Viva Cristo Rey y la Santísima Virgen de Guadalupe!!

Que Dios proteja por siempre a la Adoración Eucarística Perpetua
y a nuestra Patria.