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jueves, 27 de octubre de 2011

El Señor de los Milagros en Lima, Perú

Con motivo de celebrarse el día Viernes 28 de Octubre la culminación de los festejos en honor a esta venerada imagen del Cristo crucificado, hemos estimado apropiado el escribir este post para que aquellos que no lo conozcan, tengan la oportunidad de hacerlo a través de este servicio de la propagación de los acontecimientos y personajes de nuestra Santa Iglesia Católica.

De acuerdo a las crónicas, a mediados del siglo XVII Lima, la actual capital de la República del Perú, contaba con una población de 35,000 habitantes dentro de los que había diferentes razas, blancos, indios aborígenes, mestizos, criollos y negros. Estos últimos provenían de las costas occidentales del continente Africano y fueron traídos a América como esclavos y mano de obra para trabajos agrícolas. Los angolas se establecieron en un lugar llamado Pachacamilla cerca de Lima y vivían en extrema pobreza en galpones construidos de adobe. Uno de sus miembros, por inspiración divina, pintó a Jesús en la Cruz sobre uno de los muros de adobe.

En noviembre del año 1655 un fuerte terremoto sacudió Lima causando la destrucción total de muchas edificaciones así como los galpones de los negros pero milagrosamente el muro donde estaba pintado el Cristo crucificado permaneció intacto sin siquiera una simple cuarteadura. Ante este milagro, poco a poco las gentes acudían a venerar a la santa imagen, causando cierta inquietud en los gobernantes españoles, en especial en el Virrey, quien ordenó que se destruyera el óleo, poniendo una capa de pintura sobre él.


Por dos veces diferentes encargados de cumplir la orden del Virrey no pudieron hacerlo porque fuerzas desconocidas se lo impidieron y enterado el Virrey de los sucesos decidió revocar la orden permitiendo su veneración. Después de visitar el mismo Virrey y su esposa al Cristo Crucificado ordenó se le construyera una capilla para su adoración.



El 20 de Octubre de 1687 otro terrible terremoto azotó Lima y nuevamente la fuerza de la naturaleza echó por tierra toda edificación, incluso la capilla del Cristo de Pachacamilla, pero nuevamente el Milagro ocurrió y la pared de adobe de la capilla donde estaba la pintura de Cristo se conservó otra vez intacta por lo que inmediatamente se ordenó la confección de un óleo copia de la imagen y salió en procesión por las calles de Lima para implorar el perdón de Dios.


Es así como nació esta gran devoción al Señor de los Milagros a quien también se le conoce como Cristo Moreno, Cristo de Pachacamilla y Cristo Morado, por la relación que tuvo con sus primeros adoradores los negros africanos; por el lugar de su ubicación y por último por el hábito de sus devotos de color morado.



La imagen del Señor de los Milagros es venerada en casi todo el mundo y en más de 64 ciudades diferentes los días 18 y 19 del mes de Octubre se celebran fiestas en su honor. Entre estas ciudades deseamos mencionar a: Estocolmo en Suecia; Sídney en Australia; Anchorage en Alaska; Köbe en Japón; Roma en Italia; Madrid en España; Paris en Francia; Friburgo en Alemania; además de en toda América incluyendo Nueva York en los Estados Unidos de Norte América y por supuesto Ciudad de México en México.




Cabe mencionar que El Señor de los Milagros sale en procesión en Lima los días 18, 19 y 28 de Octubre de cada año, y que tradicionalmente todos los devotos visten durante todo el mes de Octubre un hábito de color morado en señal de penitencia y adoración al Cristo. Es por ello que en Perú se le llama a Octubre el mes morado.
El anda donde se transporta esta hecha de caoba, plata y partes de oro y su peso excede los 1800 kilos. Son miles de miles los fieles que concurren a las procesiones del Señor de Los Milagros, considerándose una de las más grandes en todo el mundo.


Para terminar debemos declarar que los testimonios de los milagros hechos por este Cristo se cuentan en muchos miles y los beneficiarios de esta gracia divina expresan su agradecimiento colocando un corazón de plata en el altar que tiene para su veneración en el convento de las Madres Carmelitas Nazarenas en Lima.

Queridos hermanos, a estas multitudes solo las mueve la fe y el amor a Jesús, por ello es que sus devotos se multiplican año por año. Así como ellos, nosotros oremos con fe y persistencia para que las capillas de Adoración Eucarística Perpetua se multipliquen en todo el Mundo, en toda América, en todo México y en todo nuestro querido Veracruz.



ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO
¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!

jueves, 20 de octubre de 2011

Acólitos y Monaguillos


La palabra Acólito significa seguidor o acompañante. Son los católicos instituidos por el Obispo para servir como Ministros de la Eucaristía y ayudar al sacerdote en las celebraciones de la liturgia. Existieron desde los inicios de la Iglesia siendo en aquellas épocas los ayudantes de los Obispos.


La palabra Monaguillo proviene de "monje pequeño" y es el niño que asiste al sacerdote especialmente durante el sacrificio de la Santa Misa, no requieren ser instituidos y generalmente deben haber recibido el Sacramento de la Comunión.

En la actualidad por costumbre se aceptan las dos denominaciones, Acólitos y Monaguillos, como sinónimos.

En su oficio los Monaguillos cumplen con el deseo y mandamiento de Nuestro Señor que dice: “Dejad que los niños se acerquen a mí.”

Creo que todos deberíamos haber sido monaguillos porque los niños que lo fueron, que lo son y que lo serán, generalmente son la semilla que producirá católicos responsables y de corazón ; y además, en ciertos casos, también sacerdotes de nuestra fe.

Las madres son las verdaderas forjadoras de estos pequeños servidores, es que ellas, con su amor y ejemplo inducen al niño a ser monaguillos y así aprendemos a amar a Dios sirviendo al sacerdote.


Quien quiera que haya sido monaguillo en su niñez recuerda con amor el palpitante regocijo que nos invadía el alma cuando el día Domingo nos poníamos nuestra casulla roja y blanca e ingresábamos al presbiterio para estar muy cerquita de Dios, asistiendo al padre celebrante de la Santa Misa. En nuestra infantil inocencia nos imaginábamos ser ángeles terrenales al servicio de Nuestro Señor a quien servíamos con dedicación y veneración por intermedio de la asistencia que brindábamos de todo corazón al sacerdote celebrante.

¡Bellos recuerdos de nuestra juventud que grabaron para siempre en nuestras almas las sagradas imágenes de las hostias consagradas y el olor del incienso con el que aromatizábamos la presencia de Dios en el altar!




¡Bendito oficio que sembró en nuestras vidas la semilla
inmortal de nuestra fe!

Siempre que observo en los monaguillos la bondad y paz que reflejan sus caritas cuando están cumpliendo sus funciones litúrgicas no puedo evitar rogar a Jesús Sacramentado y al Espíritu Santo que protejan a estos niños y los dirijan por el buen camino al encuentro de Dios.


Recomiendo también a los y las catequistas que en su encomiable labor educativa religiosa hagan de los niños de sus parroquias los hombres de bien para el mañana para la gloria de Dios Nuestro Señor.

Que infundan en ellos el amor a la Sagrada Eucaristía y a la Santísima Virgen María, Madre de Dios, porque Ustedes son las responsables de moldear el alma de esos pequeñines con la Humildad, Castidad, Caridad , Sabiduría y Entendimiento de la doctrina católica para hacerlos miembros intachables de nuestra Santa Iglesia.

Hermanos Coordinadores del grupo de Adoración Eucarística, sugiero que se organicen visitas de los niños del catecismo al Santísimo en las capillas de AEP una vez a la semana durante 15 minutos para que empiecen a conocer y amar a Jesús Sacramentado y se conviertan en el semillero de los futuros Adoradores Eucarísticos Perpetuos.

ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO

¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!

jueves, 13 de octubre de 2011

La Adoración Eucarística Perpetua: Un Camino Directo hacia Dios


Es Innegable la conexión espiritual sin interferencias que se establece con Dios Nuestro Señor, cuando ingresamos a una Capilla de Adoración Eucarística Perpetua.

El sobrecogimiento del alma se hace presente ante la Sagrada Fórmula y la infinita paz que invade íntegramente nuestro ser es el anuncio irrefutable que estamos ante la presencia de Nuestro Creador. Quien no experimente esta indescriptible sensación, no lleva en su corazón al Espíritu Santo, ni jamás lo ha tenido.

¡Dios mío y Señor mío eternas gracias te damos por permitirnos hablarte cara a cara como a un Padre bondadoso y no como a un Dios omnipotente, que sin duda lo eres, mas tu amor por los seres humanos nos da licencia para que podamos tratarte sin diferencia con la gratitud de un hijo agradecido por los favores y bendiciones que inmerecidamente recibimos de tu infinito amor paternal!

Fue un 2 de Diciembre del año 1981 que el Papa Juan Pablo II instauró la Primera Capilla de Adoración Eucarística Perpetua en la Basílica de San Pedro en Roma. Van a cumplirse 30 años de este magno evento y ya hay en el mundo muchas capillas de AEP. En México, gracias a la encomiable labor de los Misioneros de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento ya son más de 300 las capillas establecidas.

El próximo sábado 15 de Octubre tendrá lugar el Segundo Encuentro Anual de Capillas de AEP de la Diócesis de Veracruz. Este acto se llevará a cabo en la Parroquia San Rafael Guízar y Valencia del Puerto de Veracruz, sita en la calle Cempoala, entre Rio Xochiapa y Rio Bravo en el Fraccionamiento Río Medio.

El Programa será el siguiente:

  • 11:00 AM a 11:30 AM Bienvenida y Presentación de Capillas

  • 11:30 AM A 12:00 PM Animación y Alabanzas

  • 12:00 PM A 13:00 HRS Tema de AEP

  • 13:00 HRS A 14:00 HRS Receso (Alimentos)

  • 14:00 HRS A 15:00 HRS Testimonios

  • 15:00 HRS A 16:00 HRS Misa Celebración Eucarística

  • 16:00 HRS A 17:00 HRS Hora Santa Dirigida por el Pbro. Patricio Hileman



Confiamos en que todos los que deseen asistir a este evento y puedan, no dejen de hacerlo.

¡Es una bellísima experiencia que marcará en nuestros corazones la infinita bondad de Jesús Sacramentado!


Será también una oportunidad de escuchar la palabra del P. Patricio Hileman, Comisionado Papal para el establecimiento de 1000 capillas de Adoración Eucarística Perpetua en América Latina, quién con su inigualable carisma de misionero nos llevará a la unión espiritual con Dios Nuestro Señor, haciendo brillar en nuestras almas la luz eterna del espíritu Santo.

Este mensaje es también dirigido con humildad a todos los Párrocos que no tienen aún establecida una capilla de AEP, para que puedan establecer un contacto con los Misioneros y sea el primer paso que den para acercarse a la senda que conducirá a sus parroquias a la Paz y Amor de Dios vivo en la Sagrada Eucaristía.

Hermanos adoradores perpetuos de Jesús Sacramentado de Cardel y pueblos circunvecinos Dios les llama, no lo desaíren, y vestidos de blanco por fuera y con la blancura de la pureza de alma y corazón por dentro, acudamos el sábado 15 de Octubre a la Parroquia San Rafael Guizar y Valencia de Rio Medio, para encontrarnos con Dios Nuestro Señor.




ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO.

¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!

jueves, 6 de octubre de 2011

San Francisco de Asis, Seráfico Sacerdote.

Dios tocó a su corazón con la suave brisa del amor y él se lo abrió de par en par, para la Gloria de Dios Padre, para Felicidad de Dios Hijo y para la Bendición del Espíritu Santo.




El Día 4 de Octubre la Iglesia católica celebra la fecha en que San Francisco pasa a ocupar su lugar predestinado en el cielo junto a Dios Nuestro Señor. Es decir pasa de su tránsito terrenal a su morada eterna.

Nace Francisco en el año 1182 en la ciudad de Asís, Italia. Hijo de una familia de cierta riqueza material, siendo su padre un rico comerciante de telas, durante su juventud vivió en la alegría de grandes fiestas y otros eventos propios de su edad.
Al llegar a la edad de 20 años varios acontecimientos en su vida, como fueron batallas y enfermedades le llevaron a escuchar el llamado de Dios. Y decidió abandonar los placeres de la vida mundana alejándose de la ciudad para retirarse a seguir una vida de ermitaño en medio de la pobreza y cerca de Dios.

Pronto dos predilectos amigos se unieron a Francisco siguiéndoles otros más hasta que en número de doce decidieron marchar a Roma y obtener del Papa la autorización para fundar la Orden que hoy conocemos con el nombre de Frailes de la Orden Menor de San Francisco de Asís.

Francisco en su decisión de seguir fielmente a Jesús en su bondad y mansedumbre le pidió a todos su hermanos que se saludaran con estas palabras: “Paz y bien”.

Entre los muchos eventos de su vida en que se manifiesta en él la Gracia Divina, podemos citar los siguientes, corroborados por las narraciones hechas por sus biógrafos:

Cuentan que el joven Francisco tenía un asco profundo por los leprosos y un día paseando por el campo se encontró con uno de estos enfermos y siguiendo la inspiración de Jesús se acercó y le besó las llagas que tenía en la cara, quedando el enfermo repentinamente curado. Se dice que la gente no sabía que admirar más si el milagro o la extrema humildad y compasión de Francisco.

Sabiéndose verdaderamente enamorado de la pobreza, San Francisco no dejaba de alabar el humilde nacimiento en un pesebre, de Nuestro salvador. Y para recordar este gran acontecimiento creó “El Nacimiento” el cual hasta nuestros días se erige en la Navidad en muchos hogares católicos de todo el mundo.

Otro acontecimiento que marcó su vida hasta su muerte fue la aparición de los estigmas de Nuestro Señor Jesucristo en sus manos, pies y costado, los cuales le causaban terrible dolor y que él, sin embargo, bendecía y aceptaba con amor y alegría por ser la Gracia de Dios.

Por último hoy escuchamos con frecuencia la oración de San Francisco : “Señor, hazme un instrumento de tu paz”, que aunque se le atribuye a él, la oración fue escrita a principios del siglo XX por un autor anónimo. Esta es la oración ecuménica por excelencia. Al celebrar un año mas del encuentro de San Francisco con “la hermana muerte”, recemos esta plegaria por este nuestro mundo tan violento y tan necesitado de paz.



Señor, hazme un instrumento de tu paz;
Donde haya odio, ponga yo Amor.
Donde haya ofensa ponga yo perdón.
Donde haya discordia, ponga yo armonía.
Donde haya error, ponga yo verdad.
Donde haya duda, ponga yo la fe.
Donde haya desesperanza, ponga yo esperanza.
Donde haya tinieblas, ponga yo la luz.
Donde haya tristeza, ponga yo alegría.
Oh, Señor, que no me empeñe yo tanto en ser consolado como en consolar,
en ser comprendido como en comprender,
en ser amado como en amar;
porque dando se recibe,
olvidando se encuentra,
perdonando se es perdonado,
muriendo se resucita a la vida. Amén.



Hermanos, en nuestra visita al Santísimo hagamos nuevamente la promesa de cumplir puntual y amorosamente con nuestras obligaciones para con Dios Nuestro Señor, con la misma persistencia y amor con las que San Francisco cumplió con Dios durante toda su vida.



ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO

¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!