miércoles, 30 de mayo de 2012

El Seminario, Almácigo Sacerdotal de Dios



La historia de los Seminarios hace su aparición en el mundo a mediados del siglo XVI, la Ordenación de nuevos Sacerdotes antes de este siglo estaba supeditada por un lado a las Órdenes Religiosas que desde los inicios del cristianismo tenían  sus reglas como norma y el noviciado como requisito indispensable. Y por otro lado, especialmente durante el Medioevo, la Ordenación Sacerdotal se  producía por influencia de los intereses políticos y reservada a las clases más poderosas de Europa.

El Primer Seminario para la formación de sacerdotes fue fundado por Santo Tomás de Villanueva en la Diócesis de Valencia, España. Posteriormente  los Seminarios tomaron forma definitiva durante la celebración del Concilio de Trento.

En el Estado de Veracruz, México, se inicia el Seminario Mayor San José el día 2 de febrero de 1964. El papa Juan XXIII autoriza su fundación a solicitud de Monseñor José Guadalupe Padilla Lozano, Primer Obispo de la Diócesis de Veracruz. El Primer Rector del Seminario Mayor San José fue el Presbítero José Chavira, siendo el actual Rector el Presbítero Zeferino Páramo Magaña.

El seminario, escuela de los elegidos por Dios en todo el mundo, es el recinto donde los jóvenes se educan y son guiados por sus maestros para seguir los pasos de Nuestro Señor Jesucristo. Estos postulantes son los sarmientos de la vid en los viñedos de Dios.

¡Son los futuros Vicarios de Nuestra Santa Iglesia Católica en la función pastoral de la grey parroquial!

Ser llamado para seguir el camino de Cristo en un seminario es una gracia divina que Dios mediante el Espíritu Santo, implanta en las almas de los que son merecedores de tal distinción. Es una bendición para la familia, la Parroquia, la Diócesis, el país y el mundo todo.

Ser ungido sacerdote católico es el primer peldaño en la escala hacia la santidad. Reciben con este sacramento los dones del Espíritu Santo los cuales se transformarán en los que serán sus frutos: Caridad, Gozo, Paz,  Paciencia, Longanimidad, Bondad, Benignidad, Mansedumbre, Fe, Modestia, Continencia y Castidad.

Platicando un día con uno de los jóvenes seminaristas asignados por la Diócesis para colaborar con nuestra parroquia, nos comentaba lo maravilloso que era su vida en el seminario; que no podía expresar el inmenso gozo que sentía en el alma tan solo al pensar que algún día podría en sus manos sostener el Cuerpo y Sangre de Cristo en la Hostia Sagrada... Sin duda este joven es en verdad un ¡elegido por Dios!

Desde ese momento lo tenemos en nuestras oraciones diarias para que Nuestro Señor le conceda su deseo de tan puro amor.

Jóvenes que estén leyendo estas humildes líneas,  si alguna vez Jesús toca a sus puertas, no lo rechacen, acepten con un ¡SÍ! rotundo su invitación y serán felices teniéndolo como un compañero y amigo en la tierra, para después amarlo y adorarlo en el cielo por toda la eternidad.

Madres, si algún hijo les participa de su intención de ser seminarista, que sus corazones den un vuelco en sus pechos y agradezcan a Dios y llenas de amor y júbilo apoyen su decisión, porque además tendrán al fruto de su amor convertido en salvador de almas para la gloria del Señor.

Queridos hermanos, en nuestra próxima visita a Jesús Sacramentado,  en la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua, oremos pidiendo al Señor para que llame a los jóvenes y se llenen los seminarios de futuros sacerdotes santos, que contribuyan al establecimiento definitivo del Reino de Dios en toda la tierra.

Alabado y adorado sea por siempre Jesús Sacramentado

¡¡¡Viva Cristo rey!!! 




miércoles, 23 de mayo de 2012

La Divinidad del Espíritu Santo emana de Dios


El Espíritu de Dios sobrevolaba la tierra en los tiempos de la Creación del Universo tal como lo dice en el Primer Libro del Antiguo Testamento, el Génesis, en su primer capítulo: 

“Al principio Dios creó el cielo y la tierra. La tierra estaba desierta y sin nada, las tinieblas cubrían los abismos, mientras el Espíritu de Dios aleteaba sobre la superficie de las aguas"

Cuando el Arcángel San Gabriel le anunció a María la voluntad de Dios y a las preguntas de la Virgen el arcángel le contestó:

“El Espíritu Santo descenderá sobre tí y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso tu hijo será Santo y con razón lo llamarán Hijo de Dios.”  (Lucas 1, 28-35)


Una vez bautizado, Jesús salió del río. De repente se le abrieron los cielos y vio al Espíritu de Dios que bajaba como paloma y venía sobre Él. Y se oyó una voz celestial que decía: 

“Este es mi hijo, el amado; este es mi elegido.”  (Mateo 3, 16-17)


Cuando llegó el Día de Pentecostés, estaban todos reunidos en un mismo lugar. De pronto vino del cielo un ruido, como de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego, las que, separándose, se fueron posando sobre cada uno de ellos; y quedaron llenos del Espíritu Santo. (Hechos de los Apóstoles 2, 1-4)

Estos testimonios consignados en las Sagradas Escrituras son más que suficientes para confirmar la Divinidad del Espíritu Santo y que con el Padre y el Hijo conforma el Trino. base fundamental de Nuestra Santa Iglesia Católica.

Es pues, el Espíritu Santo quien  nos abre las puertas del cielo cuando somos bautizados. Él nos convierte en santos sin pecado alguno y de Él recibimos sus dones que son  a saber: Sabiduría, Entendimiento, Consejo, Fortaleza, Ciencia, Piedad y Temor a Dios.  En nuestras vidas contamos con estos dones siempre que sigamos el camino que nos señala Jesús Nuestro Señor mediante el fiel cumplimiento de sus mandamientos.

Somos muchos los bautizados que no obstante haber recibido al Espíritu Santo,  ¡No lo conocemos!... Yo soy uno de ellos y no lo conocí hasta hace muy pocos años. Como todo en la vida, la voluntad de Dios lo hizo posible y mediante la intervención de una tercera persona me dio la gracia de encontrarlo en mi camino. Desde ese bendito día mi vida ha cambiado totalmente... 

¡Voy dejando de ser yo... porque Jesús poco a poco vive en mí!

Hermanos, conozcan íntimamente al Espíritu Santo, apóyense en Él, confíen en Él, crean en Él y verán y experimentarán cosas maravillosas en su vida; y amándolo a Él, amarán a Dios... porque Él es Dios.

En las muchas y hermosas oraciones en que se menciona al Espíritu Santo, hemos encontrado en el librito azul publicado por las Hermanas Misioneras de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento, una que nos llena de amor el corazón y enciende nuestra fe como una estrella de eterna luz que palpita en todo nuestro ser. He aquí la oración:

Corazón Eucarístico de Jesús,
hoguera ardiente de caridad divina,
inflama mi corazón de amor perfecto por tí.
Déjame entregarte todo lo impuro y malo que hay en mí
y dame  a cambio tu pureza y hermosura.

¡Oh Jesús! Hazme santo. 
Haz mi corazón tan semejante al tuyo
para que tu amor brille a través de mí,
como la luz a través de un cristal
y mis hermanos puedan verte en mí. 

Que yo sea como una custodia para mostrarte al mundo. 
Por medio de María, la esposa del Espíritu Santo. 
Hoy te pedimos un nuevo Pentecostés
para que envíes tu Espíritu a todo el mundo. 

Que el fuego de tu amor divino, 
como los rayos del sol que brillan sobre todos,
toque, bendiga, ayude y cure al mundo entero. 

Que el Espíritu Santo que fluye de tu corazón Eucarístico
venga a cada uno de nosotros 
y renueve la faz de la tierra 
para que haya un solo rebaño,
¡Un solo pastor!


Alabado y adorado sea por siempre Jesús Sacramentado
¡¡¡Viva Cristo rey!!!

miércoles, 16 de mayo de 2012

La Ascensión del Señor.


En este grandioso acto, Jesús regresa a la Casa de Dios Padre, donde es recibido con toda la solemnidad y amor con que el Padre glorifica a su unigénito, el cordero sacrificado para la salvación de toda la humanidad.


La fiesta de la Ascensión del Señor tradicionalmente se ha celebrado 40 días después del Domingo de Resurrección,  en jueves, (jueves 17 de mayo del 2012) si bien puede ser trasladada por motivos pastorales al domingo siguiente (domingo 20 de mayo del 2012).  Como generalmente se celebra en la actualidad en todo el mundo católico occidental.


Las sagradas escrituras consignan este glorioso acontecimiento en el libro del Nuevo Testamento: Hechos de los Apóstoles,  Capítulo 1, 9-11 que a la letra dice:


“Y habiendo dichos estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que lo ocultó de sus ojos. Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entretanto que Él se iba, he aquí que se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: varones galileos ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo."


Así que después de resucitado Jesús estuvo 40 días en la tierra enseñando y hablando de todas las cosas que los apóstoles debían hacer; entre ellas principalmente del Reino de Dios. También les mandó que no se fueran de Jerusalén porque como ya se los había antes dicho, que si Juan los había bautizado con agua en unos días más ustedes serán bautizados por el Espíritu Santo y recibirán su poder  y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y en todo confín de la tierra. 


La Ascensión del Señor es el testimonio contundente con  que el mismo Dios nos demuestra la Divinidad de Jesús. ¿Necesitamos acaso una prueba más rotunda para creer en la  obra del Padre  por intermedio de su muy amado hijo, que se inmoló en la cruz por la redención del género humano?...


Quien no ve en la Ascensión del Señor la verdad indiscutible de un acto de Dios, no merece que la sangre del cordero lave sus pecados y por consiguiente no obtenga la dicha y gloria, una vez muerto, de contemplar eternamente el rostro iluminado de Jesús el rey del amor.


En otro detalle divino,  poco después de su ascensión a los cielos, Dios Padre cumpliendo la promesa de Jesús hecha a los apóstoles envía sobre estos al Espíritu Santo, llenándolos de la fortaleza, entendimiento y sabiduría  para cumplir con lo ordenado por Jesús, Nuestro Dios y Señor, de divulgar la palabra de Dios y evangelizar a toda la humanidad.


Ese día de la venida del Espíritu Santo se conoce como Pentecostés, es el inicio de la misión evangélica de la nueva iglesia que Dios envía para salvar al hombre de su propio mal: la iglesia constituida por Cristo y abierta a los hombres por el Espíritu Santo.


La iglesia, nuestra iglesia, inspirada por el Espíritu Santo, es sin embargo obra de hombres que cometen errores, errores que nos desmerecen la obra inspirada por Dios,  y que todos los católicos debemos aceptar y asumir con humildad.


Hermanos,  que nuestra misión evangelizadora guiada por el Espíritu Santo, sea la de multiplicar la presencia de adoradores y visitantes a nuestras Capillas de Adoración Eucarística Perpetua  para que sus frutos de caridad, paz, fe, bondad y modestia sirvan como espiritual incienso para la gloria de Dios Nuestro Señor.


Alabado y adorado sea por siempre Jesús sacramentado
¡¡¡Viva Cristo Rey!!!

miércoles, 9 de mayo de 2012

La Música... ¡Puerta que abre el Alma a Dios!


Cuando la lírica y la música de las canciones religiosas católicas se sintonizan en nuestros corazones, nos permiten entrar mediante la espiritualidad de nuestra fe en dulce contacto con Dios, Nuestro Señor.

Alguna vez leímos  una frase, que desgraciadamente no recordamos a su autor y que dice:

La música es la expresión  más pura que el mundo arrobado lanza cuando a dar forma no alcanza a su mejor  sentimiento.”

El canto, para que sea verdadera oración debe expresarse con el corazón, debemos sentirlo como un maravilloso efluvio de fe que nos sobrecoge  totalmente cuerpo, espíritu y mente, con la única intención de alabar, dar gracias y adorar a Dios Nuestro Señor. Toda otra intención, sea ésta el exhibicionismo personal  o la propia satisfacción, desvirtúa su mérito religioso.

Semanalmente, al mismo tiempo que publicamos un nuevo tema, también introducimos una canción relativa a lo tratado en el post; mediante este procedimiento enlazamos la lectura con la espiritualidad de la música haciendo que ambas se representen en nuestra mente. Es por esto, que les recomedamos hacer click con el mouse en la canción, al momento de  inicio de la lectura.

Tenemos ya completas dos Listas de Reproducción de canciones que acompañan a nuestros escritos, para su mejor conocimiento de ellas, a continuación les damos el nombre de algunas junto con un breve señalamiento de su idea principal.

EL MAGNIFICAT: Mi alma alaba al Señor, es el reconocimiento de todo el amor derramado sobre  la Santísima Virgen María… ”por siempre dichosa me dirán todas las gentes”  “enaltece a los humildes”….


ESPIRITU SANTO VEN: Canción bellísima interpretada por el coro dirigido por el Padre Mario donde le pedimos al Espíritu Santo que nos dé todos los dones que Dios nos regala.  “En el nombre del Señor santifícame, resucítame, transfórmame, toma mi vida.”

¡QUE DETALLE SEÑOR!: Canción de reconocimiento al llamamiento de Jesús. “¡Qué detalle, Señor, has tenido conmigo cuando me llamaste, cuando me dijiste que tu eras mi amigo!”… ”Te acercaste a mi puerta y pronunciaste mi nombre y yo temblando te dije ¡Aquí estoy Señor!

UN MANDAMIENTO NUEVO, NOS DA EL SEÑOR: La señal de los cristianos es amarnos como hermanos. ”Que nos amemos todos como nos ama Dios“… ”En la vida y en la muerte Dios nos ama para siempre “

DIOS TE SALVE MARIA: Precioso canto a  la Virgen María. “y bendito es el fruto que crece en tu vientre”….."María, he mirado hacia al cielo buscando tu rostro y al fin te encontré”…. ¡Tú eres Santa María por ser la Madre de Dios y la madre de toda la humanidad!… "María he querido sentirte en tantos milagros que cuentan de ti y al fin te encontré en mi camino….”

ALMA MISIONERA: canto del misionero.  “Llévame donde los hombres necesiten tus palabras”….”Donde los hombres necesiten de ti”… “por calles predicando lo bello que es tu amor.”…..”Señor toma mi vida nueva…estoy dispuesta a lo que quieras, Tú llámame a servir….”

¿QUIEN ES ESE?: canción de preguntas varias, con una sola respuesta.  “¿Quién es ese que camina sobre las aguas?”…..”¿Quién es ese que resucita a los muertos?”…..¿Quién es ese que con su muerte el pecado perdonó?  ¿Quién es ese que su nombre quiero oír?”….¡Es Jesús, es Jesús, Dios y Hombre que nos guía con su luz!…

HIMNO DE LA ADORACION REAL PERPETUA UNIVERSAL: Conmovedoras palabras de un Himno para exaltar el amor y la gloria del Santísimo Sacramento…. “Santísimo Sacramento, eterna gloria y alabanza, a Tí Jesús Adorado sacramentado por nuestro amor…”  ¡Tan solo por visitarte cruzaría toda la tierra!…”


Queridos lectores queremos agradecerles con toda humildad pero con el alma y corazón para la Gloria de Dios, a todos y cada uno de los 56,000 visitantes que se han acercado a Dios desde todos los rincones del mundo por intermedio de esta pequeña publicación. ¡Gracias queridos hermanos en nombre de Dios Padre, Dios Hijo y del Espíritu Santo!.

Alabado y adorado sea por siempre Jesús Sacramentado

¡¡¡Viva Cristo Rey!!!

miércoles, 2 de mayo de 2012

¡Mayo, Mes de la Santísima Virgen María!


Durante el mes de Mayo de cada año tenemos la inmensa alegría de venerar con todo el Amor de nuestros corazones a la Santísima Madre de Dios. Intercesora especial ante Jesús y Corredentora de nuestra salvación.

¡Dios te Salve María! hoy, postrados a tus pies nos encomendamos a tu inmaculado corazón.

De las muchas advocaciones de la Virgen María hemos querido mencionar hoy por ser el mes de Mayo, tres que se celebran en este mes: el 13 de Mayo la Virgen de Fátima; el 24 de Mayo Santísima Virgen María Auxiliadora y el 31 de Mayo Santa María Virgen Medianera de todas las Gracias.

El día 13 de Mayo del año 1917 se produjo la Gran Aparición de la Virgen María del siglo XX. Es muy conocido por todos los católicos este milagro de la aparición de la Santísima Virgen María a tres pastorcitos en la ciudad de Fátima en Portugal. Vestida completamente de blanco y entre sus manitas inmaculadas portando un rosario. Lo principal de su mensaje a los niños pastores fue de que oraran mucho. Sobre todo el Santo Rosario, y que igualmente lo hiciera toda la humanidad en recuerdo y memoria del sacrificio de su hijo en la Cruz.

El día 24 de mayo se celebra el día de La Virgen María Auxiliadora que intercedió por los cristianos, dándoles la victoria en la batalla de Lepanto derrotando a las fuerzas del Imperio turco, gracias a las universales Rogativas ordenadas por el Papa San Pio V.

El día 31 de Mayo se celebra la Festividad de la Santísima Virgen Medianera de Todas Las Gracias. Mediante esta celebración la Iglesia Católica nos enseña que está ligada a la solicitud maternal de María por todo el género humano a la misión redentora de su Hijo, que forma un todo con ella, y se extiende en todas las Gracias que Cristo nos da mediante su divina intercesión.  Esta Fiesta fue instituida por el Papa Benedicto XV en el año 1921.  En ella se nos invita a recurrir siempre con toda confianza a la intercesión de la Santísima Virgen María.


María es la Reina del Cielo y de la Tierra, así lo confirma San Juan en el libro del Apocalipsis Cap.12,1: ”UNA GRAN SEÑAL APARECIO EN EL CIELO: UNA MUJER, VESTIDA DE SOL, CON LA LUNA BAJO SUS PIES, Y UNA CORONA DE DOCE ESTRELLAS SOBRE SU CABEZA.”

María es Madre de todo el mundo porque el mismo Cristo lo proclama cuando clavado en la cruz dice: “ALLÍ TIENES A TU MADRE.” Juan 19,27

María vive ahora ayudando a toda la humanidad a encontrar a Jesús en el Santísimo Sacramento, tal como se manifiesta en diferentes testimonios de las más recientes apariciones de la Santísima Virgen María.

¿Quién no puede sentirse atraído por la dulce mirada de la Virgen María?... si en esos ojos de radiante y serena pureza se ve reflejada el alma más pura de la Madre de Dios.

¿Quién puede negarse a escuchar en su mente el eco de su voz celestial que llena de amor maternal nos pide adorar a Jesús, su Hijo, el Hijo de Dios?

¿Quién puede negar su inmaculada pureza?... si por ser la virgen mas pura de todo el universo, Dios la escogió para engendrar por obra del Espíritu Santo a Jesús su muy amado Unigénito Bendito.

Quien no siente en el alma la tierna sonrisa, la leve caricia de su celestial presencia cuando invoca su nombre y humilde cae de rodillas murmurando una plegaria dice: “Más que Tú, solo Dios, solo Dios”... 

¡No sabe quién es la Santísima Virgen María!

Queridos Hermanos, continúen rezando el Santo Rosario, en la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua, en el Templo, y en el Hogar y alegremos el corazón de la Santísima Virgen María Madre de Dios y Nuestra también.



ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO

¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!