miércoles, 28 de diciembre de 2011

Un Año Más para seguir mi camino hacia Tì.

Con la fe puesta en el alma y la mirada fija en el camino,

siguiendo tus pasos que van marcando mi ruta


y me acercan un poco más hacia tí Dios y Señor mío


¡Así recibo este Año Nuevo!


Pensando y soñando contigo Jesús mi Bendito Pastor.


Y daré también gracias al Espíritu Santo para que siga iluminando con su eterna sabiduría lo que mi mano escribirá para la gloria y alabanza de Dios Nuestro Señor. Y que la Santísima Virgen María, Madre de Dios interceda por mí y les de forma a mis ofrendas y se las entregué al Dios Padre, a Dios Hijo, tu Hijo Adorado y al Espíritu Santo y ver así cumplido el deseo único que tiene para el nuevo año éste tu humilde adorador.


No miro ya para atrás el camino recorrido, los hechos de mis acciones, malas y buenas han sido inscritas en el libro de mi vida, te pido perdón por las primeras con el corazón contrito y por las segundas te doy las gracias, por haberme permitido realizarlas siguiendo tu amorosa y misericordiosa insinuación.


Dios Mío, te amo con todo mis sentidos, con todo lo bueno que tengo y que Tú sembraste en mí. Dios mío en Ti espero, en Ti confío y en Ti creo.



Mírame aquí Señor con el alma azotada por tanta maldad reinante en el mundo, por la gran indiferencia de aquellos que ayer falsamente te adoraron y hoy reniegan de Ti, por todos aquellos que no han llegado aún a conocerte por la falta de evangelizadores que les muestren tu camino. Por todos ellos, por el mundo entero: Te ruego Señor que les toques el corazón con tu infinita misericordia, los perdones y nuevamente escuches las palabras que Jesús tu Hijo unigénito, pronunció en la cruz:


“Padre perdónalos, porque no saben lo que hacen”


Hermanos, tengamos conciencia en este nuevo año de cambiar nuestros malos hábitos, de perdonar al que nos ofende, de dar de comer al hambriento, de vestir al desnudo, de amar sin reparar en raza, religión o situación económica, amar con el mismo corazón que Jesús nos ama. Y los que ya hacen todo esto, sigan haciéndolo con el espíritu de cristianos verdaderos, solo por amor a Dios. Que nuestras acciones por insignificantes o rutinarias que sean siempre lleven impregnado el amor y la alegría con que debemos siempre hacerlas. De esta manera estaremos cumpliendo con la voluntad de Dios Padre y estaremos convirtiendo una espina de la corona clavada en Nuestro Salvador por un pétalo de la más delicada flor.



A nuestros queridos hermanos Adoradores Perpetuos de la Santísima Eucaristía les exhortamos a ¡Seguir Adelante! con los compromisos de honor contraídos con Jesús Dios y Señor Nuestro:


¡NO DEJAR DE ASISTIR A NUESTRA HORA SANTA SEMANAL!


Nuevamente les recordamos que no hay justificación para nuestra ausencia porque Dios es primero que todas las cosas, así lo mandó hacer Él mismo en los Diez Mandamientos que entregó a Moisés en el Monte Sinaí, siendo el primero:


“AMAR A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS”

Para terminar queremos expresar a los lectores de este humilde Blog en todo el mundo nuestras gracias por leernos semanalmente y para este nuevo año les decimos las palabras de Nuestro Seráfico Patrono de esta Parroquia:


“PAZ Y BIEN”.




ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO


¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Nacimiento de Jesús,... ¡Máximo hito de la humanidad!

“Siendo rico, por nosotros se hizo pobre, a fin de que nos
enriqueciéramos con su pobreza
"



Belén es uno de los pueblos más antiguos de Palestina. Está situado a 8 Km al sur de Jerusalén, allí nació Nuestro Señor Jesucristo, descendiente del Rey David, que también nació en Belén. Su nombre proviene del hebreo “beth lechem” que significa: casa de pan, por la fertilidad de su suelo.



Jesús nació en Belén porque, José siendo de la casa de David, debía ir desde Nazaret con su esposa embarazada a cumplir con el censo ordenado por el Emperador romano Augusto César. Así se cumplió lo anunciado por los profetas y ratificado por los Evangelistas en el Nuevo Testamento, Lc 2, 1-7 y Mt 2, 1-3.
José y su esposa María según la costumbre Judía tenían que empadronarse en Belén por ser descendientes de David y viajaron desde Nazaret donde residían para lo cual recorrieron 140 Km en una jornada que transcurrió entre 3 y 5 días.



Cuando llegaron a Belén buscaron posada donde pasar la noche para descansar del largo viaje sin encontrar un lugar que los albergara. Ante esta situación y ante la proximidad del parto de su esposa embarazada, José buscó refugio en una de las cuevas en las que los pastores guarnecían a sus animales.



Habiéndose producido en ese lugar el alumbramiento, María tomó al niño en sus brazos y lo envolvió en unos pañales depositándolo sobre un pesebre cubierto del forraje con que se alimentaban los animales. ¡Esta fue la humilde venida al mundo del Hijo de Dios, nuestro salvador y redentor!




Es así como empieza la vida en la tierra de nuestro amadísimo Dios y Señor, entre la adoración de sus padres y de algunos pastores que se hallaban esa noche en vigilia cuidando de sus animales. Y con el regocijo de Dios Padre en el Cielo y los ángeles que le ofrecían su bienvenida cantando: “Gloria a Dios en el cielo y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad.”



¡Qué espectáculo tan sublime, qué milagro de amor de Dios tan perfecto!, engendrar a su hijo unigénito por obra del Espíritu Santo en el vientre de la Inmaculada y sin pecado Original, Santísima Virgen María.


¡Celebremos el Nacimiento de Jesús con todo el respeto y amor que se merece el hijo de Dios hecho hombre!


¡Colmemos su humilde pesebre con las oraciones y bendiciones de lo más puro que tengamos en nuestros corazones!


¡Llenos de júbilo alabemos y adoremos al Niño Dios de nuestra infancia y rebosante el alma de sincero arrepentimiento imploremos perdón al Cristo hombre crucificado por nuestros pecados!




El día de la próxima Navidad olvidemos un poco nuestros intereses materiales. Que a la llegada de la Noche Buena tengamos presente el motivo principal de nuestra celebración y de toda nuestra vida: Jesús el Cordero de Dios y que nuestro primer saludo sea para Él, nuestro Señor Dios y redentor... luego vayamos amorosos y demos un saludo a nuestros padres, a nuestros hijos, a nuestros esposos, a nuestros familiares y amigos y a todo ser que necesite de una muestra de respeto, cariño y sinceridad.



Queridos hermanos si esta Noche Buena les toca acompañar al Santísimo en la capilla de Adoración Eucarística Perpetua, han sido ustedes escogidos por Jesús Sacramentado para que en persona le puedan dar su testimonio de Paz y Amor y El con su inmensa bondad e infinita misericordia les pondrá un beso en su corazón.





ALABADO Y ADORADO SEA POR SIEMPRE JESUS SACRAMENTADO


¡¡¡VIVA CRISTO REY!!!

jueves, 15 de diciembre de 2011

Virgen Santísima de Guadalupe


Este 12 de Diciembre del 2011 se conmemora el 480 Aniversario del milagro de Nuestra Señora de Guadalupe por el cual la Santísima Virgen se presentó ante Juan Diego para demostrar al mundo entero su amor a la humanidad y en especial a los pueblos del nuevo continente recién descubierto, el continente americano.


A continuación publicamos una breve reseña de este prodigioso acto, la cual ha sido extraída del sitio católico, http://www.reinadelcielo.org/


Ciudad de México, 1531

Conocemos bien la esencia del milagro de Guadalupe. La aparición se inició el 9 de diciembre de 1531 en las cercanías de la ciudad de México, entonces ciudad capital del Imperio Azteca: la Virgen se aparece al indio Juan Diego, y le pide que transmita al Obispo del lugar su voluntad de que se construya un templo dedicado a ella en el cerro Tepeyac. El obispo, al escuchar el relato del indio, le pide una prueba de la presencia de la Madre de Dios allí.


María hace crecer entonces un jardín de rosas en un cerro inhóspito y semidesértico, y se las hace recoger en su tilma (especie de poncho o manta) a Juan Diego. Luego le pide que se las presente como prueba de su presencia al obispo. Cuando el indio abre su tilma frente al obispo, caen las flores al piso y aparece milagrosamente retratada la imagen de la Virgen María en la rústica tela.



El templo dedicado a la Virgen de Guadalupe fue construído en el cerro tepeyac, lugar de las apariciones, donde hasta nuestros días se exhibe la tilma original de Juan Diego, impresa con la mundialmente conocida imagen de la Virgen de Guadalupe.


Para entender lo ocurrido allí en su más fresca y maravillosa expresión, le sugerimos leer el relato escrito en idioma indio y luego traducido al español pocos años después de los hechos, por un sabio indígena, Don Antonio Valeriano. El documento es conocido como el nican mopohua (“aquí se narra”). El autor recoge allí el testimonio del propio indio Juan Diego, pocos años después de los hechos acontecidos en el cerro del Tepeyac. La naturalidad y belleza de la narración dan una impresión vívida de los diálogos entre el indio vidente y la Virgen María, así como de la realidad de la época en que todo ocurrió.



Como premio a su participación directa en este milagro, el Papa Juan Pablo II canoniza en julio de 2002 al indio Juan Diego: quien ahora es San Juan Diego y su fiesta se celebra el 9 de diciembre de cada año.




Hermanos, son incontables los testimonios y pruebas existentes que confirman irrefutablemente las apariciones de la Virgen de Guadalupe, bástenos nombrar algunas de ellas:


  • La tilma de San Juan Diego está hecha en una burda tela de maguey cuya duración no puede exceder los 30 años, pero ésta tiene ya más de 400 años y ¡se mantiene intacta!


  • La imagen de la Virgen de Guadalupe estampada en la tilma mantiene la brillantez de todos sus colores. Después de muchas pruebas científicas realizadas se ha demostrado que no fue pintada por un ser humano y que la materia de los colores no existe en la tierra. La imagen no está directamente sobre la tilma sino flota en el aire a unas fracciones de milésimas de milímetros sobre ella.



  • En las pupilas de los ojos de la Virgen se halla grabada la escena completa de cuando San Juan Diego muestra las rosas al Obispo Fray Juan de Zumárraga.




Hermanos, ¿cabe acaso la menor duda en nuestros corazones de la autenticidad de este milagro de Dios? ¡Absolutamente no! Es prueba suficiente para caer postrados ante la venerada imagen de Nuestra Señora de Guadalupe y exclamar con toda el alma:


¡Virgencita morena de Guadalupe, en tí creemos y en tí adoramos a tu
Divino Hijo, Nuestro Señor Jesucristo!


En nuestra próxima visita al Santísimo en su Capilla de Adoración Eucarística Perpetua, recemos en honor y gratitud a la Virgen María de Guadalupe, un Rosario para que siga intercediendo por nosotros ante su hijo Jesús, Dios y Señor nuestro.

Alabado y adorado sea por siempre Jesús Sacramentado

¡¡¡Viva Cristo Rey!!!

jueves, 8 de diciembre de 2011

María, Inmaculada Madre del Universo.



Hoy es tu día Madre mía, y humilde vengo a adorarte Reina de mi corazón y Dueña de mi vida entera. De las mil plegarias que aletean en mi mente, solo te puedo decir:

“Más que tú, solo Dios... solo Dios.”


Hoy celebramos lo que Dios dispuso en la eternidad de sus actos y que le tocó a la humanidad reconocer por medio del Papa Pío IX un 8 de diciembre de 1854, hace hoy exactamente 157 años: el Tercer Dogma Mariano, la Concepción de la Inmaculada Virgen Santísima María del hijo único de Dios, Jesús Nuestro Señor.


Es así que después de 4 años de la anunciación del Tercer Dogma, en el año 1858, la misma Virgen María se presentó en Lourdes, Francia a la niña Bernardita diciéndole: “yo soy la Inmaculada Concepción.” ¡Qué más certeza, qué más fehaciente prueba de la verdad de este Dogma Mariano!


Desde un principio Dios escogió y preparó con todo su amor de sabiduría celestial a la que fuera bendita entre todas las mujeres, para ser la madre de su muy amado hijo, Jesucristo Nuestro Señor, Dios Salvador y Redentor.


Vayamos con desbordante alegría en el alma a cantarle junto con los coros celestiales un himno a la Virgen María que le demuestre que nuestro corazón, transformado en una hermosa rosa roja, lo ponemos a sus pies para que ella se lo entregue a Dios nuestro creador. Hallemos aquí en este acto de amor para que lo entiendan todos los que no creen y no saben por qué los católicos veneramos a nuestra Madre Santa, es porque la Santísima Virgen María en todas su advocaciones es nuestra intercesora ante el luminoso trino de nuestra fe: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.


Quisiéramos tener hoy la humildad y amor de San Francisco de Asís y la sabiduría e inteligencia de San Agustín, ambos hijos amantísimos de la Virgen María, para poderle ofrecer lo más lindo y puro de nuestros pensamientos para convertirlos en una plegaria de infinito amor que le diga por una eternidad:


“Dios te salve María, llena eres de gracia,

Bendita tú eres entre todas las mujeres, Madre de Dios.”


Confiemos en María y que ella nos proteja como a Jesús protegió en la noche de la primera navidad tomándolo en sus brazos dándole todo el amor que Dios Padre puso en su corazón.

Hoy en el cielo a la derecha del Padre junto con Dios Hijo y bendecida por el Espíritu Santo, desde lo alto nos entrega todo su amor y sonriendo nos dice:

“Hijitos míos hagan todo lo que Jesús les pide. Oren mucho con fe y alegría.”
Así pues, aléjense del mal y con sus pies pisoteen la cabeza de Satanás y acaben para siempre con su hipócritas promesas llenas de falsedad y algún día, tal vez muy pronto, quizás mañana estaremos junto con ella en el paraíso alabando y adorando a Dios Nuestro Señor. Queridos hermanos recemos hoy con devoción y amor la oración de la Virgen María, el Santo Rosario, y al repetir cada Ave María ¡entreguemos a Dios nuestra adoración y a la Virgen María nuestro corazón!


Alabado y adorado sea por siempre Jesús sacramentado

¡¡¡Viva Cristo rey!!!

jueves, 1 de diciembre de 2011

Capilla AEP Ciudad Cardel, Ver. 2º Aniversario.

El pasado 26 de noviembre tuvimos la satisfacción de celebrar el 2º Aniversario de la instalación de la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua en nuestra Parroquia.

Damos gracias a Dios Nuestro Señor por habernos concedido el honor de estar presente en ella todos los días, y hasta que su voluntad divina lo determine. También agradecemos a nuestro respetado Obispo, Monseñor Luis Felipe Gallardo Martín del Campo quien nos distinguió al oficiar el Santo Sacrificio de la misa el día del aniversario. Asimismo, no podríamos dejar de dar nuestro agradecimiento sincero a nuestro querido Párroco Presbítero Rodolfo Cervantes Gordillo, quien con su acostumbrado entusiasmo dirigió y coordinó todos los actos de esta fiesta. Por último reconocemos profundamente la labor llevada a cabo por las hermanas y hermanos adoradores perpetuos que colaboraron con su trabajo y amor a la feliz realización de este acto.


Han sido 104 semanas, 730 días y 17,520 horas en las que cerca de 53,000 personas pasaron una hora de su vida una vez a la semana, adorando a Jesús Sacramentado, durante estos dos años pasados.


Somos un pequeño pueblo que cuenta con 19,000 habitantes pero muy orgullosos de nuestras tradiciones y sobre todo de nuestras creencias religiosas, una muestra de ello es la constancia con la cual los adoradores perpetuos cumplen con su sagrado compromiso con Dios Vivo de visitarlo una hora a la semana las 52 semanas del año. Es una adoración como su nombre lo indica, perpetua y que solo se terminará cuando se termine nuestra vida terrenal.



Queremos expresar una especial consideración a nuestros hermanos adoradores de los turnos de la noche y de la madrugada que no obstante la inseguridad reinante en la mayoría de las ciudades de todo el mundo, no han dejado de cumplir con Dios. Cabe mencionar que durante los dos años de vida de nuestra capilla no se ha producido ni el más leve daño a algún adorador de estos turnos. Dios los protege y el Espíritu Santo siempre los acompaña.


Cada Capilla de AEP es un milagro de Dios, es la más delicada y esplendorosa muestra de amor que los seres humanos tributamos a Jesús Sacramentado con la fe que nos da el Espíritu Santo. Es pues, la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo que se manifiestan en este bello monumento de adoración por medio del cual la nueva alianza se concreta en forma irrefutable. Es el camino a la santificación del ser humano, es la preparación para la segunda venida del Hijo de Dios, es la consumación del propósito y razón de la Santa Iglesia Católica.




Quien quiera comprobar lo precedente, que se acerque a una Capilla de AEP y le pregunte al Santísimo, que es Dios Vivo en persona, y de seguro tendrá la respuesta que espera su corazón.


Hoy, hermanos, en esta fría madrugada, acompañando a nuestro creador en la capilla, con el santo rosario en una mano y en la otra mi librito de oraciones y en mi corazón con la grandeza de Dios Padre, la tibia dulzura del Hijo y el consejo y fortaleza del Espíritu Santo, les quiero dar a conocer el final de mi oración:

¡Gracias una vez más a Dios Todopoderoso y al Espíritu Santo por ayudarnos a la preparación y publicación de ésta, la voz escrita de todos los corazones católicos de la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua de Cardel!. Y gracias también a todas las personas que nos visitan semanalmente para estar en contacto con Jesús Sacramentado, que es quien inspira nuestras ideas y pensamientos.


Alabado y adorado sea por siempre Jesús sacramentado

¡¡¡Viva Cristo Rey!!!